Como se q me he vuelto un gran cronista, haré el relato de la segunda etapa del Open Mtb Lanjaron, empezamos el breve calentamiento y nos vamos a nuestros respectivos cajones de salida. Empieza la prueba y nos meten una subida de unos 5 o 6 kms con un porcentaje medio del 9%, bajamos por zonas rápidas y peligrosas, por el estado del carril y como no nuestras respectivas bajadas técnicas, pasamos ...por línea de meta. Empieza segundo puerto, 13 kms de ascensión, bastante bastante duro, al principio con porcentajes del 15 o 20%, prácticamente aflojar sobre el 8 o 9%, entramos en zona de tierra y zonas tecnicas con piedras, plan reventón, morales y tal, pero en duro; después de subir los pechugones de la muerte y antes de llegar al final de la ascensión comienza el airazo del demonio, lo cual nos hunde más q el chaval q nos paso al mayoría del pelotón con una 26 de hierro y con zapatillas de deporte.
Seguimos hasta coronar y empieza lo mejor de la carrera, bajadas muy técnicas con piedras, porcentajes desmesurados. ... hasta llegar al 3 puerto no muy largo pero técnico y duro, de su correspondiente bajada con más de 25% de desnivel, tierra suelta y piedras, era de locura, se bajaba más rápido a pie q en bici, comprobado ehhhh.
Nos dirigimos hacia meta con bajadas muy técnicas disfrutando y eso q yo soy malillo pero hoy me he portado, asustandome al final xq un tío q quería hacer el 300 y pico casi me estampa en zona de piedras, terminamos en parte de la crono de ayer y llegamos meta. Mi compañero Miguel se sale en la carrera con un puesto 19 en la categoria y un tiempazo con el nivel q había. El servidor sufre como una rata acabado con dignidad sobre mitad de tabla en una carrera con casi 800 bikers.
La organización perfecta, es espectacular, hay q volver. Como siempre dar las gracias a los patrocinadores y a mis compañeros de viaje, con los q he compartido buenos momentos, siendo mi amigo Miguel Miguel Angel Sauces, Gregorio Blanco Anula y Demetrio Sillero.
Gracias a todo y sobre todo a mi Fran Hidalgo de Toro por su continuo apoyo q lo necesito ya q soy un walking dead.
— en Lanjaron, Sierra Nevada.
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